¿Estás pensando en tener un perro? La adopción te permite salvar una vida y contribuir a reducir el abandono y el maltrato animal. Descubre las distintas formas de hacerlo.
Los perros son los mejores amigos del hombre, y tener uno en casa puede aportarnos muchos beneficios, tanto físicos como emocionales. Sin embargo, no todos los perros tienen la suerte de encontrar una familia que los quiera y los cuide. Por eso, si estás pensando en tener un perro, lo mejor es que optes por la adopción. Así estarás salvando una vida y contribuyendo a reducir el abandono y el maltrato animal.
Pero, ¿cómo adoptar un perro? Existen diferentes formas de hacerlo, y cada una tiene sus ventajas e inconvenientes. En este artículo te explicamos las principales opciones que tienes para encontrar a tu compañero ideal.
Una de las formas más sencillas de adoptar un perro es preguntar a tus familiares, amigos o conocidos si tienen o conocen a algún perro que necesite un hogar. De esta manera, podrás conocer al animal antes de adoptarlo y saber más sobre su historia, su salud y su personalidad. Además, podrás mantener el contacto con la persona que te lo dio y así facilitar la adaptación del perro a su nuevo hogar.
Sin embargo, esta opción también tiene sus desventajas. Por un lado, puede que no encuentres a ningún perro que se ajuste a lo que buscas o que no haya ninguno disponible en ese momento. Por otro lado, puede que te sientas presionado a adoptar a un perro por compromiso o por pena, aunque no sea el más adecuado para ti.
Otra forma de adoptar un perro es buscarlo en las redes sociales. Hoy en día, muchas personas utilizan plataformas como Facebook, Instagram o Twitter para difundir casos de perros que necesitan una familia. Puede tratarse de cachorros que han nacido de forma accidental, de perros abandonados que han sido rescatados o de perros que han sido cedidos por sus dueños por diversos motivos.
La ventaja de esta opción es que podrás ver fotos y vídeos del perro y contactar directamente con la persona que lo ofrece. Así podrás resolver todas tus dudas y acordar una cita para conocer al animal. Además, al no haber intermediarios, el proceso suele ser más rápido y sencillo.
No obstante, también hay que tener cuidado con esta opción. Algunas personas pueden mentir sobre el estado o el origen del perro, o incluso pedir dinero por él. Por eso, es importante verificar la veracidad de la información y asegurarse de que el perro está sano y vacunado. También es conveniente firmar un contrato de adopción para evitar problemas futuros.
Pero no hay duda que una de las opciones más recomendadas es acudir a una protectora, un refugio o una perrera. Estos son lugares donde se acogen a los perros abandonados o maltratados hasta que encuentran una familia definitiva. En estos sitios podrás encontrar una gran variedad de perros de todas las edades, tamaños y razas. Además, al adoptar a un perro de una protectora estarás ayudando a liberar espacio para que otros puedan ser rescatados.
Normalmente, las protectoras cobran una cuota de adopción que cubre los gastos veterinarios del perro, como la vacunación, la desparasitación o la esterilización. Además, suelen pedir una serie de requisitos y documentos para asegurarse de que el adoptante es responsable y adecuado para el animal. Por ejemplo, pueden solicitar una copia del DNI, un comprobante de ingresos o una visita al domicilio.
Recuerda que con Adopta K9 puedes darle un nuevo hogar a un perro jubilado de la policía. ¿Cómo? Es muy sencillo, tan solo tienes que leer nuestra sección ¿Cómo adoptar?, y descubrir cuál es el proceso. Te permitirá darle una segunda oportunidad a un animal que lo necesita y disfrutar de su compañía.
Recuerda que adoptar un perro es una decisión muy importante que implica una gran responsabilidad. Por eso, antes de hacerlo, debes estar seguro de que podrás ofrecerle todo lo que necesita: alimento, agua, higiene, ejercicio, educación y cariño.
