Este es Turbo, un valiente y noble pastor alemán que llegó a la unidad en plena juventud, a los dos años de edad. Con su natural habilidad para el trabajo, pronto se convirtió en un perro operativo y dio todo de sí mismo en su labor como perro policía.
Turbo ha vivido una vida llena de trabajo y dedicación, pero ahora, con 11 años, se ha jubilado y está en búsqueda de un hogar donde sea amado y cuidado incondicionalmente. Aunque pueda no ser muy sociable con otros perros, los tolera con amabilidad. Su corazón es enorme y su lealtad hacia su nueva familia será inquebrantable. ¿Serás tú quien le brinde el hogar que tanto anhela?